Por: Wilfred Labiosa/Columnista de TRT*
Durante el 2011, ¡qué muchas cosas malas nos han pasado! Pero durante estas situaciones siempre he visto gente abrazándose. Después de los tornados en la parte oeste de Massachusetts, después de las inundaciones en Vermont y Rhode Island, las nevadas en Connecticut, el estrés por la economía, y todas las demás situaciones ocurridas en el 2011, la gente siempre busca el apoyo de alguien y un abrazo. Los abrazos son muy importantes para nuestro diario vivir. Maya Angelou, la poeta reconocida, dijo: “Yo he aprendido que cada día debemos buscar y ‘tocar’ a alguien. Las personas aman un abrazo caluroso o simplemente alguien que de una palmada en la espalda y este ahí para ti.”
Los abrazos cambian nuestras expresiones, nuestros sentimientos, nuestros sentidos, y tantas cosas más. Hay estudios que dicen que lo psicológico, emociones, cuerpos, corazones y tanto más en nuestros cuerpos cambian al recibir o dar un abrazo. Dicen que es la forma más pura de manifestar nuestro cariño, afecto y amor. Hay muchos que le ponen títulos y nombres a los diferentes tipos de abrazos pero el mero acto de ser abrazado/a es lo más importante. Después de que el abrazo sea apropiado y no forzado, el acto puede cambiar el día y quizás algunas veces hasta nuestras vidas. En ocasiones, cuando me siento mal o con estrés y llego a mi casa, mi esposo está ahí y me da un abrazo y todo cambia. Otro ejemplo sucede con mi perrita, la abrazo y todo cambia. No importa a quién le das o quién te da un abrazo, puedes estar seguro/a que todo cambia.
Hace unos días vi la entrevista que le hicieron a la Senadora Gifford y entre todo note como el esposo y ella se daban las manos y se abrazaban. Cuando eso sucedía, todo cambiaba en la cara de la Senadora; el esposo dijo que siempre él le daba un abrazo y se daban cariños aunque las cosas se veían negativas. Y ahora miren como ella hasta camina y habla, no quiero decir que sólo los abrazos la curaron sino que la ayudaron a sentir energía positiva y a cambiar como se sentía cada día.
Después de que la nueva ley a favor de los derechos para nuestro/as hermano/as transgénero fue pasada y aprobada el mes pasado, nos abrazamos y besamos para celebrar este acontecimiento. En una boda, se confirma y ‘sella’ el acontecimiento con un beso y abrazo. Los abrazos son unas acciones imprescindibles en momentos positivos y en otros no tan positivos. Los abrazos nos ayudan a sentirnos mejor a la misma vez que hacemos sentir a la otra persona mejor. Los abrazos son la cura para la ansiedad, tensión, tristeza, y soledad.
En esta época de fiestas, recordemos esto y demos abrazos y dejemos que otros/as nos den abrazos. Este puede ser el mejor regalo del 2011. No nos cuesta nada excepto el esfuerzo de levantar nuestros brazos, movilizar nuestros músculos y movernos hacia la persona, traer los brazos juntos-un abrazo. Estos abrazos deben salir de lo más profundo de nuestra alma, desde lo más fondo de nuestro cuerpo.
¡Vamos a abrazar a todos/as! Hay muchas personas que no tienen hogar, que están tristes, que se sienten aislados/as, deprimidos/as, y sin familias/amistades, a estos/as vamos a darles abrazos y la esperanza de que todo puede cambiar. Estas personas necesitan de nosotros/as. Vamos a dar de nuestro tiempo, ir a un albergue, servir comidas y dar abrazos a los/as más necesitados durante esta época de fiestas. Debemos aprender la importancia de un abrazo. Traten de dar por lo menos dos abrazos al día.
Si pudiera, les daría a todos/as ustedes un abrazo, pero espero que esta columna les enseñe la importancia de un abrazo y que todos/as reciban de mi parte un abrazo en esta época de Navidad, Hanukkah y Kwanzaa. Los/as quiero y le doy gracias por seguir leyendo esta columna. Les quiero dar un fuerte abrazo a las dueñas de este periódico (The Rainbow Times), a mi familia, a mi esposo y a todos/as mis amistades que me rinden apoyo incondicional durante todo el año. ¡Gracias!
Como Maya Angelou dijo: “He aprendido que las personas se olvidan de lo que tú les dices, las personas se olvidan de lo que tú haces, pero las personas nunca se olvidan como los haces sentir”. ¡Feliz Navidad y todo lo mejor para el 2012! ¡Les deseo mucho amor, paz y abrazos!
*Escrito por Wilfred Labiosa, líder comunitario, psicólogo, y Director Ejecutivo de CASPAR, Inc. (www.casparinc.org).
