Por: Francisco “El Jimagüa” Cartagena Méndez */Columnista TRT—
Las paradas gay se han convertido en una tradición a nivel mundial. Cada año se marcha por el orgullo LGBTT, en un evento mediante el cual nos visualizamos y se realizan reclamos por los derechos de nuestra comunidad. Sin embargo, lo que comenzó como un reclamo luego de Stonewall en junio de 1969, se ha convertido en todo un carnaval.
Luego de los disturbios de Stonewall el 28 de junio de 1969, la comunidad gay en Estados Unidos comenzó a visibilizarse y a enfrentar un sistema que perseguía a los gays. Este suceso es conocido como el movimiento moderno pro-derechos LGBTT en Estados Unidos y en todo el mundo.
Cada año en diferentes países del mundo se realizan paradas de orgullo gay “Gay Pride”. En Puerto Rico se celebran dos paradas en el mes de junio (primer domingo de junio en San Juan y en el municipio de Cabo Rojo el segundo domingo de junio). El principal objetivo de estas actividades lo es la visibilidad de las comunidades lésbicas, gays, bisexuales, transgéneros y transexuales (LGBTT).
Aunque soy de los que tengo ciertas reservas sobre la manera mediante la cual muchas personas gays demuestran su orgullo en las paradas gay (en ropa interior, por ejemplo), de la misma manera creo en la libertad de expresión del ser humano.
Muchas personas gays no están de acuerdo con algunas actitudes, comportamientos o con la vestimenta que utilizan miembros de la comunidad en las paradas gay, expresando que por dicha razón no asisten a las mismas. Tus acciones propias son las que deben importarte, así como el reconocer la importancia de visibilizarse sobre cualquier creencia social o cultural sobre lo que está correcto o incorrecto en determinado evento o momento.
Es importante resaltar que la comunidad LGBTT ha soportado cientos de años de opresión, invisibilidad, homofobia, persecuciones y rechazo. Por tanto, en un día de celebración de orgullo gay, habrá una gran diversidad de formas mediante la cual diferentes gays expresen su orgullo y contrarresten el tiempo perdido por causa de la homofobia. Tampoco es coherente generalizar a toda una comunidad por el comportamiento de algunos de sus miembros.
El principal propósito de la parada gay lo es visibilizar nuestras orientaciones sexuales, lo que permite elevar nuestro orgullo y dignidad humana. El pronunciamiento de reclamos sobre la equiparación de nuestros derechos con los de la comunidad heterosexual es otro objetivo importante de este evento.
Con haber obtenido en Estados Unidos y en Puerto Rico el matrimonio igualitario no se terminó la lucha por nuestros derechos. Aún queda mucho trabajo por hacer. Los líderes fundamentalistas prosiguen con su agenda de odio, comprando la conciencia de políticos con dinero y con amenazas electorales, con el fin de crear leyes homofóbicas y discriminatorias, así como para revocar los pocos derechos ya obtenidos.
Este año en Puerto Rico se debe hacer un reclamo por la transfobia, el racismo, el “bullying” y “cyber-bullying”, así como el rechazo familiar (por causa del fundamentalismo religioso) siguen presentes en nuestras sociedades. Se debe abogar por una ley clara contra el discrimen en el empleo y en lugares privados y públicos, que no esté condicionada a los reclamos de fundamentalistas religiosos. Además es importante la educación sexual preventiva y reclamar mejores accesos a los servicios de salud para personas con enfermedades crónicas y de transmisión sexual.
En el mundo aún hay miles y miles de personas gays siendo brutalmente agredidas, asesinadas o marginadas por su orientación sexual. Por ello es de vital importancia hacernos sentir en nuestras sociedades, educar sobre diversidad en todos los foros necesarios y celebrar nuestro orgullo.
Sea cual sea la forma mediante la cual decidas expresar tu orgullo en una parada gay, asistir a la misma es el mayor acto de protesta y lucha que puedes realizar. Caminar con la frente en alto, dejarle saber a nuestras sociedades y a nuestros gobiernos que existimos y que no somos ciudadanos (as) de segunda clase; que exigimos respeto, libertad y protecciones es una obligación para toda persona que compone la comunidad LGBTT.
*Escritor y activista de derechos humanos puertorriqueño.
Para comentarios al autor puede escribirle a su correo; eljimagua@live.com – Twitter: @eljimagua.